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Las lluvias de los últimos días han beneficiado a los cultivos hortícolas y de regadío

viernes, 23 de junio de 2006

Las lluvias registradas en los últimos días han beneficiado a los cultivos hortícolas y de regadío, según se recoge en el según se recoge en el informe semanal sobre la situación del campo, elaborado por el Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación, correspondiente al periodo comprendido entre los días 16 y 23 de junio.


Desde el punto de vista meteorológico, esta semana se ha caracterizado por la presencia generalizada de precipitaciones, de carácter tormentoso principalmente, en la primera mitad del periodo, con temperaturas ligeramente superiores a las medias históricas y predominio de viento norte.

En concreto, las lluvias de los días 19 y 20, aunque generalizadas en toda Navarra, tuvieron carácter tormentoso, por lo que estuvieron muy irregularmente repartidas en cuanto a registros, incluso entre localidades próximas. A pesar de estas precipitaciones, las temperaturas no han remitido y la media del periodo se ha situado, en las comarcas de la Ribera, de 3º a 3,5 ºC por encima de la media histórica del mes. En general, este estado del tiempo ha sido beneficioso para estos cultivos, con las excepciones habituales de rajado en cereza, mojado del forraje o condiciones favorables para ciertas enfermedades, como bacterias o mildiu). Pero incluso en el caso de la alfalfa, las lluvias han venido bien para el crecimiento del tercer corte, que está recién comenzado en Ribera Baja o a punto de comenzar la semana próxima en Ribera Alta. El segundo corte ha finalizado con buenas producciones y calidad.

Las lluvias también han beneficiado al ajo para finalizar el engorde del bulbo, una vez terminada la faena de eliminar el tallo floral, y a punto de iniciar la campaña de recolección comercial. Prácticamente todos los cultivos de verano instalados presentan un cierto adelanto fenológico, ya que también las temperaturas de junio están siendo superiores a la media histórica. Por lo general, los trabajos y labores no se han visto entorpecidos por las lluvias, que han caído en un periodo en que la actividad hortícola en siembras y plantaciones es muy baja, dándose por concluidas las últimas plantaciones de pimiento en Lodosa y las de maíz de segundo cultivo (todavía se puede hacer alguna de maíz dulce). También están prácticamente terminados otros cultivos menores como melón, soja o remolacha de mesa, así como judía seca y pocha (en Puente la Reina, Tierra Estella o Sangüesa). En el próximo mes de julio proseguirán las de judía verde, último cultivo de verano, plantándose ya algunos cultivos de otoño-invierno, como puerro, y las primeras parcelas de cardo.

Con el inicio de recolección de las primeras peras (“delbard premier” y “castell”) la campaña frutera incorpora nueva especie y prosigue con sus buenas perspectivas de producción y excelentes calidades en cereza, albaricoque y nectarina.

Rendimientos y pesos específicos del cereal

En cuanto a la campaña de cereal, las lluvias registradas han provocado la paralización de las operaciones de recolección de cebada y guisante proteaginoso, principalmente en áreas de Tierra Estella, Pirineos y Cuenca de Pamplona, y en menor medida en Navarra Media y Ribera. Así, con pausas debidas a las lluvias, continúa la recolección de cebadas prácticamente en toda Navarra: en la Ribera se dan meros inicios de recolección de trigo duro, y en Ribera Alta y Navarra Media comienza la de avena.

La recolección de cebada lleva buen ritmo, e incluso en áreas de Artajona, Larraga, Miranda, Sesma o Carcastillo, ya van muy avanzadas y se está terminando. Por el contrario, en las cotas más septentrionales de este cultivo (Yerri, Ezcabarte, Urroz) sólo se dan meros inicios. En cuanto a rendimientos, en Ribera Baja se obtienen valores en torno a los 1.500-2.500 Kg./ha, en Ribera Alta entre los 2.700-4.000 Kg./ha y en Navarra Media desde 3.000 Kg./ha en el sur, hasta más de 5.500 Kg./ha en el norte. En Tierra Estella, valores similares a la anterior campaña y en el resto de zonas (norocccidental, Cuenca de Pamplona y Pirineos) se presenta una buena campaña, aunque todavía está comenzando.

En cuanto a los pesos específicos, los comienzos fueron muy prometedores con valores cercanos a los 70. Sin embargo, estos resultados están bajando un poco en algunas zonas, como Larraga, Lerín y Los Arcos, sobre todo en la variedad “hispanic”.

Respecto a otros cultivos, continúa la recolección de guisante grano con resultados dispares, ya que mientras en el norte los rendimientos son óptimos, en la Ribera hay algunos campos que no se van a cosechar y sirven, junto a las rastrojeras, de alimentación para los rebaños de ovino. Las habas caballares de la zona de Tierra Estella siguen su maduración y se espera una excelente campaña. En los cultivos de verano, las últimas lluvias han sido muy beneficiosas, de manera que los girasoles, que se encuentran ya inmersos en floración, auguran una buena campaña. Por último, la patata para multiplicación de variedades de zonas de Salazar, Aezkoa y Erro se encuentran en plena nascencia, y el maíz forrajero de Sakana y Baztán está sufriendo un impulso vegetativo muy significativo.

Por lo que se refiere a aprovechamientos de praderas, tras finalizar los ensilados y henificados de primer corte, las últimas lluvias van a permitir el repunte y mantenimiento de dichas praderas, si bien el segundo corte se va a ver un poco mermado por la ausencia prolongada de precipitaciones.


Gobierno de Navarra

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